La memoria de Claudio Morresi

Han pasado treinta años entre las dos imágenes. Claudio Morresi. Hace treinta años era un buen futbolista que despuntaba en el Huracán. Era una de las grandes promesas argentinas, llegando incluso a disputar el Mundial Juvenil de 1981 que se disputó en Australia. Posteriormente, en su carrera, llegaría a fichar por el River Plate, con el que compartiría delantera con Enzo Francescoli, y tomaría parte con Los Millonarios que ganarían Libertadores e Intercontinental en 1986. También tuvo tiempo de probar fortuna un breve periodo en Colombia, con el Independiente de Santa Fe, otro en México con el Santos Laguna además de otras camisetas argentinas como las de Velez Sarsfield y de Platense. También, tuvo un breve periodo como entrenador dirigiendo al Huracán, el club en el que se formó, empezó y en el que más tiempo estuvo en activo.

Pero allí también fue cuando apenas era un muchacho que se formaba donde vivió sus años más duros. Donde sucedería un hecho que marcaría su vida. Claudio Morresi se preparaba para disputar un encuentro de las categorías inferiores. Apenas tenía 14 años. Y desde hacía un mes, tras un Golpe de Estado, se había instaurado el Proceso de Reorganización Nacional, dando lugar una dictadura militar en Argentina.. Su hermano Norberto, era un combativo joven de diecisiete años. Un muchacho de izquierdas que soñaba con construir un mundo mejor. Pero un 23 de abril de 1976, se denunció su desaparición.

A Morresi no le dijeron la verdad. Esa misma noche tenía que disputar un encuentro, y se le avisó que "Norberto ya apareció". Claudio, disputó el encuentro, anotó un tanto y jugó con desparpajo. Ya regresaba a casa para celebrarlo, cuando allí volvió a dar de bruces con la realidad. Su hermano Norberto seguía desaparecido... Y así sería hasta 1989. 

Claudio siguió jugando al fútbol. Quizá esperanzado en ver regresar a su hermano. Quizá consciente del triste final que le aguardaba. Jugó en Primera División, se proclamó Campeón Intercontinental con River Plate, llegaría a defender a Argentina en categoría juvenil... Mientras, su madre se desvivía como tantas Madres de la Plaza de Mayo en buscar a su hijo. En trabajar sin descanso denunciando las desapariciones que llevaba a cabo el Gobierno Argentino. En tratar de averiguar  que había sido de su hijo, de apenas diecisiete años... 

No lo sabría hasta 1989. Sus restos fueron identificados en un cementerio. Había fallecido de seis disparos en la cara ese mismo 23 de abril de 1976. Desde 2004, Claudio Morresi ejerce de Secretario de Estado para el Deporte en Argentina. Desde donde trata de rendir homenaje a su hermano, haciendo lo que él pretendía. Construir un mundo mejor.

PD Agradecer a Claudio Zuth el aviso de esta magnifica historia.