jueves, 27 de agosto de 2020

Munir celebra la Europa League con la bandera bereber


Es una de las tantas abundantes imágenes de la celebración del Sevilla en Colonia de su 6ª Europa League. Como es habitual varios jugadores se rodean con alguna bandera sea de su país, de su región... la que ellos consideren. Y eso hace Munir El Haddadi pero en su caso coge la bandera “amazigh”, la que representa al pueblo bereber. En un momento incluso posa con ella mientras que sus compañeros Bono y En-Nesiry portan la de Marruecos. Una mezcla poco habitual y que incluso hace años podía haber levantado mucha polémica sobretodo en Marruecos.

Munir, de origen bereber, nacido en El Escorial

Munir no es ningún desconocido, ya que lleva varios años en la primera categoría de nuestro fútbol. Su madre melillense, se casó con su padre marroquí bereber, pero en busca de mejores oportunidades económicas se desplazaron a la Península, y en 1995 en la localidad madrileña de San Lorenzo de El Escorial nació Munir. Tras iniciarse en el Galapagar, y llamar la atención del Atlético de Madrid, acabaría llegando al fútbol base del Barcelona. En la Masía destaca y es un habitual de las categorías inferiores de la Selección Española. Pero su progresión sigue siendo mayúscula, con apenas 18 años tendría un debut fulgurante con el primer equipo del Barça, debutando y marcando en Liga. Con apenas dos partidos en Primera, y ante el run run de que el chico también podría ser Seleccionable conMarruecos, Del Bosque le hace debutar a nivel Absoluto con la Selección Española en un duelo en Valencia ante Macedonia. Era septiembre del año 2014.

Después su carrera padeció un pequeño freno. Ese inicio prometedor en el Barça acabó resultando efervescente y la competencia arriba le fueron quitando minutos, volviendo a acabar el año con el filial en Segunda. Probó suerte con una cesión en el Valencia y disfrutó bastante minutos en Vitoria. Pero, ese destacado debut internacional con apenas 18 años, sería su única aparición con la Selección Española. Tanto, que cuatro años después, Marruecos llegó a consultar a la FIFA la posibilidad de tramitar el cambio de Selección de Munir. Y el jugador aceptó y mostró su predisposición a acudir al Mundial defendiendo la camiseta del país norteafricano. Pese a que el debut de Munir había sido en un torneo oficial clasificatorio para la Eurocopa, la FIFA no accedió al trámite. Y hasta el propio Del Bosque, trató de justificar su convocatoria en 2014 por las bajas que había en ataque en la Selección y estar Munir concentrado con la Sub 21. Aunque lamentaba que apenas esos minutos saliendo del banquillo impidieran al jugador acudir al Mundial, donde curiosamente, además se hubiera tenido que enfrentar a España. ¿Quién sabe? Quizá con un nuevo empujón y siendo Luis Enrique el mismo técnico que le abrió las puertas de Primera División, Munir todavía pueda regresar a “la Roja”.

Bono y Es-Nasiry, dos marroquíes también con larga experiencia en España

Los que hubieran podido ser compañeros de Munir si hubiese logrado tramitar el cambio de Selección hubieran sido otros dos jugadores destacados sevillistas. El portero Yassine Bounou, que en España ha pasado por varios equipos: la cantera del Atlético de Madrid, Zaragoza y Girona. Y pese al descenso de los catalanes, sus buenos años le abrieron la puerta del Sevilla. Aunque la mayor parte del año estuvo a la sombra de Vaclik, sus últimas y decisivas actuaciones le han convertido en otro de los héroes destacados de la campaña del Sevilla. También ha tenido actuaciones meritorias el delantero Yousef Es-Nasiry, otro marroquí que parece seguir escalando en su carrera. Tras dar el salto por Málaga y Leganés, este año finaliza con 10 goles en 25 partidos oficiales con el Sevilla. Los tres hoy disfrutan del sexto título de campeón de la Europa League con el Sevilla y nos deparaban una de esas fotografías del partido conjuntando las banderas de Marruecos y la del pueblo bereber.


El precedente de Afellay

Por cierto, que la bandera amazigh no es la primera vez que la veíamos en un campo de fútbol celebrando un triunfo. Se la había enfundado también Ibrahim Afellay, el jugador del Barcelona cuando ganó la Champions League al Manchester United en Wembley en 2011. El jugador neerlandés, selección con la que fue internacional en más de 50 ocasiones y disputó el Mundial de 2010, había nacido en los Países Bajos, a donde se habían desplazado sus padres rifeños en busca de mejores oportunidades económicas. Afellay, destacó en el fútbol y tras muchos años a buen nivel en el PSV le llegó la oportunidad de recalar en el Barça, donde las lesiones le cortaron la trayectoria y apenas tuvo relevancia, antes de iniciar un periplo de cesiones. Sin embargo cuando el Barça se proclamó campeón, Afellay decidió portar la bandera bereber, algo que de nuevo levantó alguna polvareda, tanto en Holanda como en Marruecos.

Las complejas relaciones del Rif y Marruecos

No es fácil sintetizar que es el pueblo bereber y su presencia en Canarias y varios países del Norte de África, y concretamente en el caso de Marruecos, donde su presencia es la más abundante. Constituyen una raza con lengua propia y de la que se estima que pertenecen en torno a 50 millones de personas. Presente a lo largo de la historia cuenta con personajes destacados desde la época del Imperio Romano hasta nuestros días. Sin embargo, el pueblo carece de estado o de una entidad administrativa que permita contemplar correctamente su presencia. Sus limites geográficos son difusos y, su influencia o permisividad en los estados en los que se integran varia de muchos condicionantes.

Desde la independencia del Protectorado de Marruecos de España en los años 50 del siglo XX, la relación con los bereberes ha sido más bien tensa. Ya anteriormente, la República del Rif había provocado verdaderos quebraderos de cabeza a la política española en los años 20, logrando su independencia de facto, provocando la caída de Gobiernos, convirtiendo en pesadilla el nombre de Abd del Krim y continuando la depresión histórica que padecíamos desde el 98. Desde la inclusión del Rif en el Reino de Marruecos se han producido diversas revueltas y ha formado parte de focos de tensión diplomática entre España y Marruecos.

Los reinados de Mohamed V y Hassan II fueron bastante duros con las regiones del Rif. Se extendió la represión, se abandonaron inversiones y desarrollo sometiendo a un duro aislamiento a las ciudades y no se permitían las protestas y las reivindicaciones. La situación pareció aligerarse un poco con la llegada al trono de Mohamed VI que ha tenido mayores gestos hacia esa región, ha mejorado infraestructuras, anunció la construcción de varios hospitales y ha llegado a visitar la región en varias ocasiones aunque también se acompañó de ilegalizaciones de partidos y asociaciones rifeñas, o con un nuevo brote de protestas en 2016 por la muerte de un comerciante al que la policía marroquí había requisado su mercancía. En apenas unos meses, se cumplirán 100 años de la proclamación de la República del Rif. ¿Habrá una nueva mecha de protestas? ¿Se logrará avanzar en concordia y se podrán ver las banderas juntas como protagonizaban los jugadores del Sevilla?